Cuando se trata de elegir materiales para una cocina industrial, especialmente una con detalles de metal, muchos se preguntan si es mejor optar por el cuarzo o el granito. A menudo oigo hablar del cuarzo de ingeniería, y déjame decirte que es un material compuesto, creado con aproximadamente un 90-95% de cuarzo natural mezclado con resinas y pigmentos. Esta composición le da una apariencia uniforme, disponible en una amplia gama de colores, lo que se adapta a cualquier diseño de cocina industrial. Además, el cuarzo es altamente resistente a las manchas, lo que es crucial en una cocina donde los aceites y otros líquidos podrían salpicar.
Por otro lado, el granito ha sido un favorito en las cocinas por años. Cada placa de granito es única debido a sus patrones naturales, lo que le da un carácter especial a cualquier espacio. En términos de durabilidad, el granito también es muy resistente y puede soportar temperaturas de hasta 480 grados Fahrenheit, lo cual es conveniente en ambientes donde el calor y los cambios abruptos de temperatura son comunes. Sin embargo, a veces necesita ser sellado para mantener su resistencia a las manchas, lo que implica un poco más de mantenimiento periódico comparado con el cuarzo.
Si nos ponemos a hablar de costos, en general, el granito puede resultar un poco más económico, con precios que en promedio van desde los 40 a 100 dólares por pie cuadrado, mientras que el cuarzo puede ir de 50 a 120 dólares por pie cuadrado, dependiendo del diseño y de la marca. Hablando de marcas, empresas como Silestone y Caesarstone son reconocidas por sus superficies de cuarzo de alta calidad. Estas marcas garantizan que sus productos no solo sean estéticamente agradables, sino también duraderos y perfectos para el uso intensivo que podría tener una cocina industrial.
Una de las grandes ventajas del cuarzo es su baja porosidad. ¿Por qué es importante? Pues porque significa que no requiere ningún tipo de sellado, lo que no solo supone un ahorro de tiempo, sino también de dinero a largo plazo. Además, al no ser poroso, es menos probable que las bacterias crezcan en la superficie, un punto crítico en cualquier entorno donde la higiene es primordial.
El granito, aunque menos costoso inicialmente, a la larga podría implicar algunos gastos de mantenimiento adicionales. Como dice un dicho popular en el mundo de la construcción: “lo barato a veces sale caro”. Sin embargo, para aquellos que adoran la apariencia genuina de la piedra natural y disfrutan del trabajo artesanal, el granito sigue siendo una opción inigualable.
En definitiva, la elección entre cuarzo y granito para una cocina industrial depende del balance entre estética, costos y mantenimiento. Si valoras una superficie que combine belleza uniforme y bajo mantenimiento, el cuarzo podría ser tu mejor apuesta. En cambio, si prefieres una apariencia única y no te importa invertir algo más de tiempo en mantenimiento, el granito te fascinará. Si quieres profundizar en este tema, te recomiendo visitar este [enlace](https://www.panmin.com.es/enfoque-en-la-durabilidad-del-cuarzo/).